Cómo Alcanzar la Excelencia
*Metas y objetivos: El tener claramente lo que queremos en nuestras vidas nos permite visualizar un panorama más seguro al ir cumpliendo con esto; desarrollan más tus capacidades y te das cuentas que puedes llegar tan lejos como desees.
*Disciplina: Esto es indispensable en todo lo que hagas ya que la constancia es la llave que te abrirá la puerta para obtener el éxito.
*Innovación diaria: Estar abiertos a constantes cambios para ir evolucionando. Adquiriendo, nuevos conocimientos y técnicas para llevarlas a cabo y no caer en la mediocridad.
*Creatividad: ¡Sí! Deja fluir tus ideas, inventa cosas nuevas, usa tu imaginación para no caer en la monotonía.
*Haz tu mejor esfuerzo: Da siempre tu máximo empeño en todo lo que hagas. Sabemos que en bastantes ocasiones, nos tocará hacer cosas que no deseamos o gusten. Sin embargo, al hacerlo encontrarás una gran satisfacción.
*Compromisos y responsabilidades: Empieza contigo mismo y deja a un lado los miedos. Recuerda que entre más grandes sean mayor será la recompensa.
Reflexión:
La excelencia es la búsqueda hacia la superación no sólo en una aspecto, sino de una forma integral en todos los ámbitos de nuestra vida. Pero cuál es el punto de partida hacia nuestra búsqueda?, donde comenzamos cuando sentimos que nos hemos estancado en algo?, como salir del precipicio en el que estamos inmersos?, como sacudirnos la depresión por no sentirnos realizados?, que camino tomar, cuando las decisiones tomadas sólo nos han acarreado problemas y frustraciones?, a quién pedir ayuda cuando experimentamos soledad y vacío?, como sabemos que vamos por el sendero correcto?, porque para lo que unos es sencillo y natural, para nosotros resulta complejo e imposible?, porque la vida día con día es tan insoportable?. Como pretender ser excelente cuando se experimentan todos estos aspectos?
Si bien todo debe comenzar desde analizar el porque de nuestra inconformidad y frustración, y porque nos hemos permitido cargar con esa pesada losa de depresión durante todo este tiempo?, si algo nos hace ¨sentirnos¨ es esto precisamente: aquello que se le llaman prejuicios, culpas y remordimientos. Ese es sin duda el origen de todos nuestros problemas, el concepto que poseamos de nosotros mismos; nadie nos bloquea, nadie nos limita, nadie nos hace infelices; queremos sentirnos mal porque así lo hemos decidido, porque así lo hemos asumido y porque es la vía más sencilla de evadir la oportunidad de encaminarnos hacia la excelencia. En el momento en que dejemos de autocompadecernos, daremos los primeros pasos para despertar y engancharnos de nuevo a la vida.
Es cierto que si sabemos que nos hace daño y nos hace sentirnos insignificantes ante los demás, el problema es que no queremos reconocerlo, quién mejor que nosotros para saber que nos ¨impide¨ crecer y trascender. Cuando se desea hacer un cambio radical, simplemente no se piensa, sólo se actúa y ya!. No se está pensando si no va a resultar, sólo se confía en el instinto y la intuición. Por naturaleza el ser humano posee toda la potencialidad para salir del bache en que ha caído. Todo depende en primer instancia de un cambio de actitud, para iniciar el resurgimiento; el tiempo no esta en nuestra contra, es nuestra mentalidad la que nos bloquea; nunca es ni será tarde para emprender un nuevo proyecto de vida, se necesita ante todo voluntad y persistencia para fijar nuestras metas y objetivos, saber hacia donde vamos y que deseamos lograr nos dará las bases para comenzar a desarrollar nuestro plan de acción, donde la disciplina es fundamental si deseamos obtener resultados satisfactorios, ni todos está descubierto y eso nos da una amplia posibilidad para innovar en base a nuestra capacidad de ser creativos, siempre hacia la mejora y la perfección, no temerle a los resultados iniciales, todo requiere de un arranque y se necesita paciencia para que se vayan mostrando los primeros resultados producto de nuestra constancia y determinación.
La excelencia es aceptar que la vida posee claroscuros que son necesarios para aprender más de nosotros mismos y aspirar a crecer, siempre son una idea primordial, aceptar los riesgos como retos para mejorar día con día, para madurar ante los imprevistos y calamidades, para pulir nuestra actitud y visión de la meta que deseamos realizar; pero si debemos tener algo presente: que la excelencia parte del interior hacia el exterior, y no del exterior solamente, porque de que sirve tener éxito a nivel económico, empresarial o social, cuando internamente hay insatisfacción, infelicidad y vacío?, cuando a pesar de tenerlo ¨todo¨, se tiene nada?, de que sirve ser popular y ampliamente reconocido a nivel social, cuando se carece de autoestima y amor a si mismo?, de que sirve poseer un amplio y exitoso curriculum, cuando se carece de realización personal a nivel emocional y mental?. El aspirar a la excelencia no es ser capaz o exitoso en un solo aspecto o una faceta; la excelencia parte del equilibrio en todas y cada una de las facetas de la vida personal, es realización en todos sentidos, es experimentar plenitud y equilibrio.
Alcanzar la excelencia es luchar por ser coherentes en sentimiento, pensamiento, palabra y acción para alcanzar nuestras metas y propósitos; y no ser alcanzados por el ciclo final de nuestra existencia alimentando la desidia y conformismo.
*Disciplina: Esto es indispensable en todo lo que hagas ya que la constancia es la llave que te abrirá la puerta para obtener el éxito.
*Innovación diaria: Estar abiertos a constantes cambios para ir evolucionando. Adquiriendo, nuevos conocimientos y técnicas para llevarlas a cabo y no caer en la mediocridad.
*Creatividad: ¡Sí! Deja fluir tus ideas, inventa cosas nuevas, usa tu imaginación para no caer en la monotonía.
*Haz tu mejor esfuerzo: Da siempre tu máximo empeño en todo lo que hagas. Sabemos que en bastantes ocasiones, nos tocará hacer cosas que no deseamos o gusten. Sin embargo, al hacerlo encontrarás una gran satisfacción.
*Compromisos y responsabilidades: Empieza contigo mismo y deja a un lado los miedos. Recuerda que entre más grandes sean mayor será la recompensa.
Reflexión:
La excelencia es la búsqueda hacia la superación no sólo en una aspecto, sino de una forma integral en todos los ámbitos de nuestra vida. Pero cuál es el punto de partida hacia nuestra búsqueda?, donde comenzamos cuando sentimos que nos hemos estancado en algo?, como salir del precipicio en el que estamos inmersos?, como sacudirnos la depresión por no sentirnos realizados?, que camino tomar, cuando las decisiones tomadas sólo nos han acarreado problemas y frustraciones?, a quién pedir ayuda cuando experimentamos soledad y vacío?, como sabemos que vamos por el sendero correcto?, porque para lo que unos es sencillo y natural, para nosotros resulta complejo e imposible?, porque la vida día con día es tan insoportable?. Como pretender ser excelente cuando se experimentan todos estos aspectos?
Si bien todo debe comenzar desde analizar el porque de nuestra inconformidad y frustración, y porque nos hemos permitido cargar con esa pesada losa de depresión durante todo este tiempo?, si algo nos hace ¨sentirnos¨ es esto precisamente: aquello que se le llaman prejuicios, culpas y remordimientos. Ese es sin duda el origen de todos nuestros problemas, el concepto que poseamos de nosotros mismos; nadie nos bloquea, nadie nos limita, nadie nos hace infelices; queremos sentirnos mal porque así lo hemos decidido, porque así lo hemos asumido y porque es la vía más sencilla de evadir la oportunidad de encaminarnos hacia la excelencia. En el momento en que dejemos de autocompadecernos, daremos los primeros pasos para despertar y engancharnos de nuevo a la vida.
Es cierto que si sabemos que nos hace daño y nos hace sentirnos insignificantes ante los demás, el problema es que no queremos reconocerlo, quién mejor que nosotros para saber que nos ¨impide¨ crecer y trascender. Cuando se desea hacer un cambio radical, simplemente no se piensa, sólo se actúa y ya!. No se está pensando si no va a resultar, sólo se confía en el instinto y la intuición. Por naturaleza el ser humano posee toda la potencialidad para salir del bache en que ha caído. Todo depende en primer instancia de un cambio de actitud, para iniciar el resurgimiento; el tiempo no esta en nuestra contra, es nuestra mentalidad la que nos bloquea; nunca es ni será tarde para emprender un nuevo proyecto de vida, se necesita ante todo voluntad y persistencia para fijar nuestras metas y objetivos, saber hacia donde vamos y que deseamos lograr nos dará las bases para comenzar a desarrollar nuestro plan de acción, donde la disciplina es fundamental si deseamos obtener resultados satisfactorios, ni todos está descubierto y eso nos da una amplia posibilidad para innovar en base a nuestra capacidad de ser creativos, siempre hacia la mejora y la perfección, no temerle a los resultados iniciales, todo requiere de un arranque y se necesita paciencia para que se vayan mostrando los primeros resultados producto de nuestra constancia y determinación.
La excelencia es aceptar que la vida posee claroscuros que son necesarios para aprender más de nosotros mismos y aspirar a crecer, siempre son una idea primordial, aceptar los riesgos como retos para mejorar día con día, para madurar ante los imprevistos y calamidades, para pulir nuestra actitud y visión de la meta que deseamos realizar; pero si debemos tener algo presente: que la excelencia parte del interior hacia el exterior, y no del exterior solamente, porque de que sirve tener éxito a nivel económico, empresarial o social, cuando internamente hay insatisfacción, infelicidad y vacío?, cuando a pesar de tenerlo ¨todo¨, se tiene nada?, de que sirve ser popular y ampliamente reconocido a nivel social, cuando se carece de autoestima y amor a si mismo?, de que sirve poseer un amplio y exitoso curriculum, cuando se carece de realización personal a nivel emocional y mental?. El aspirar a la excelencia no es ser capaz o exitoso en un solo aspecto o una faceta; la excelencia parte del equilibrio en todas y cada una de las facetas de la vida personal, es realización en todos sentidos, es experimentar plenitud y equilibrio.
Alcanzar la excelencia es luchar por ser coherentes en sentimiento, pensamiento, palabra y acción para alcanzar nuestras metas y propósitos; y no ser alcanzados por el ciclo final de nuestra existencia alimentando la desidia y conformismo.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home