viernes, julio 03, 2009

Movimiento

A unos discípulos que no dejaban de insistirle en que les dijera palabras de sabiduría, el Maestro les dijo:
¨La sabiduría no se expresa en palabras, sino que se revela en la acción¨.

Pero cuando les vio metidos en múltiples actividades , soltó una carcajada y dijo: ¨Eso no es acción. Es movimiento¨

Reflexión:

Nuestro mundo se encuentra atrapado en la inercia permanente del movimiento lo cuál lo hace finito, así como nuestro universo esta regido por las leyes de un orden superior que está en constante movimiento, cambio y evolución, donde el tiempo no existe, todo es inmutable e infinito, que escapa más allá de la comprensión del ser humano, en ese orden universal todo es armónico, imperturbable y desconocido, cada uno de los astros, planetas y galaxias actúan bajo esta inteligencia suprema y nuestro mundo es parte integral de esta armonía, sin embargo, cada uno de los seres vivos que conformamos este planeta, poseemos parte de esta inteligencia universal, lo cuál hace actuar en forma instintiva a las plantas y los animales, quienes en su percepción el tiempo no existe, sólo es un concepto que el ser humano creo para tratar de explicarse y tener una mejor comprensión del este orden universal del cuál estamos regidos, y así poder aliviar su angustia e incertidumbre hacia aquello que aún desconoce y que escapa de su comprensión; los animales no poseen ese sentido del tiempo por que ellos se encuentran en armonía con este orden superior infinito, sólo actúan gobernados por este inteligencia universal que les fue proporcionada, no poseen percepción de la muerte, simplemente viven cada instante de acuerdo a este constante movimiento universal, y en su sabiduría instintiva actúan como parte del todo cumpliendo sus ciclos existenciales e inmortalizándose a través de la procreación.

Que sucede con el ser humano que en apariencia interrumpe esta armonía universal? Porque es el aparente eslabón perdido de la gran cadena donde el rompe con este equilibrio natural? Que hace del ser humano un ser que destruye lo relacionado a la naturaleza, en lugar de unirse a esta armonía universal? Acaso será como se menciona en el Génesis cuando desobedece esa integración y armonía con la naturaleza al renunciar a este orden universal y por consecuencia ser expulsado del paraíso, en cuya acción se niega a formar parte de esta armonía en constante movimiento? Y a partir de ahí anhela reencontrarse con su yo interior, con esa inteligencia universal que habita en él, al sentirse expulsado y aislado y por consecuencia condenado a deambular eternamente en la búsqueda de ese conocimiento que le proporcione plena certeza de su destino final? Y en lugar de integrarse a esta constante evolución, con sus acciones ambiciosas y destructivas involuciona?.

Desde que el ser humano adquirió conciencia de su entorno, desde siempre ha experimentado angustia por aquello que se escapa de su control, aquello que considera omnipotente más allá de su propia concepción, y en esa constante incertidumbre deja de experimentar plenamente su momento presente, donde en lugar de vivir en constante movimiento y armonía con su entorno, hay ocasiones en que percibe que se ha detenido en alguna parte del tiempo, en que ha dejado de evolucionar, en que siente que la vida carece de sentido, en que se siente vacío, insatisfecho y angustiado al no percibir su futuro inmediato, y al ser presas del factor tiempo siente que cada instante esta viviendo contrareloj, obsesionado más por la muerte que por la vida misma, dejándose gobernar por el tiempo que ya transcurrió y el que aún no ha transcurrido, se encuentra alternando entre un tiempo y otro, rebotando cruelmente entre una y otra percepción, y en esa obsesiva idea, su mente se contamina de temores, prejuicios, angustia e incertidumbre, el pensamiento se encuentra en la mayor parte del tiempo contaminado por tales sensaciones destructivas, camina por las calles, por los parajes, por los amplios bosques y por las orillas de la inmensidad del mar sumergido en estos pensamientos, escapándose a su atención todo lo magno y sublime que se encuentra a su alrededor, ocasionalmente observa, ocasionalmente escucha, ocasionalmente siente, ocasionalmente percibe su olfato, le da más importancia a lo externo, a la apariencia, a la crítica, a los bienes materiales; se encuentra confinado y encapsulado en está pequeña esfera llamada mundo y peor aún, atrapado en sus pensamiento obsesivos, irónicamente se encuentra ensimismado y meditabundo, y sin embargo poco analiza su interior.

Como hallar la sabiduría de la vida y la sabiduría inmersa en nuestro interior, si estamos constantemente obsesionados por extrapolar nuestros pensamientos en lugar de interiorizarnos y así aspirar a vivir el momento presente al máximo haciendo a un lado el factor tiempo. Acaso es muy difícil por un momento en la vida alejar tales pensamientos y ser capaces de percibirnos, sentirnos, experimentar cada vivencia sin anteponerle un prejuicio? Y en esa casi olvidada capacidad de experimentar esa armonía que se encuentra a nuestro alrededor, el descubrir que todo cuanto nos angustia, lo enfocamos hacia el interior, ¨sorprendentemente¨ nos daremos cuenta que gran parte de nuestras angustias e incertidumbres se hallan en nosotros mismos!, estamos tan condicionados e inducidos por los estándares sociales, por los crueles calificativos y críticas de que somos objetos día con día, que eso nos va alejando cada vez mas de nosotros mismos y adquiendo todo tipo de mecanismos de evasión sólo para no sentir ese vacío interno, y apegarnos obsesivamente a todo cuanto material hay en nuestra sociedad, a competir sin justificación alguna contra alguien para demostrar que somos mejores, que valemos como personas, que somos mas poderosos, que poseemos mejores bienes materiales, que somos más atractivos físicamente, que somos más populares, que nos consideren personas socialmente aceptables, fingiendo una individualidad que no poseemos en realidad sólo para ser el centro de la atención, que en ese vacío interno que experimentamos a lo largo de nuestra vida lo compensamos ofreciendo ¨caridad¨ a las personas, ¨preocupándonos¨ por su bienestar, por ¨tenderle¨ una mano en situaciones difíciles; sólo para experimentar por un momento una satisfacción de haber cumplido con nuestro prójimo, acaso eso es una verdadera caridad?, cuando incluso valoramos más a una persona que a nosotros mismos!, eso es en realidad amor?, una frase versa así: ¨No des a aquellos que sabes que podrán regresarte algo a cambio; la verdadera caridad se encuentra cuando entregamos a aquellos que sabemos que no podrán regresarnos algo a cambio¨.

La sabiduría de la vida por más que la busquemos en lo material, por más que lo compensemos ayudando a los demás sólo por satisfacer el ego y nuestra conciencia, sólo experimentaremos cada vez mayor vacío. La sabiduría este en el saber, pero en el saber quienes somos, de donde venimos y a donde vamos, la vida es autoconocimiento integral, y ese conocimiento es vivir momento a momento la vida, a ser atentos a todo momento a lo que sucede en nuestro entorno, a permitirnos por un momento, solo por un momento a controlar nuestro movimiento interno, a ser conscientes sólo por un momento a observar no a mirar, a escuchar no a oír, a percibir y sentir no a ser indiferentes de nuestro entorno, a dejar de angustiarnos sólo por un momento de aquello que vivimos en el pasado y que dejamos de hacer, a dejar de obsesionarnos con aquello que nos sucederá y que nos hace actuar prejuiciosamente y con ignorancia en nuestras relaciones humanas y que nos va aislando en el temor y la soledad espiritual.

La sabiduría solamente se revelará en la acción, en la acción de sentirnos, de escucharnos, de percibir nuestras sensaciones sin etiquetarlas, solamente sentirlas y experimentarlas como algo revelador y renovador, de permitirnos por vez primera realizar una introspección y tratar de identificar el origen de nuestras obsesiones, el origen de nuestros sufrimientos y dudas existenciales. Para ser parte de la armonía y el movimiento con el orden universal, basta sólo con integrar nuestros pensamientos al instante presente como una nueva oportunidad segundo a segundo para redescubrirnos y experimentar esa inaudita paz y equilibrio interior, limpiándonos ya de tantos pensamientos negativos y destructivos que sólo nos precipitan hacia una involución; al estar plenamente conscientes de nuestras acciones y posibles reacciones internas, sabremos como actuar ante situaciones inesperadas y nuevas. El autoconocimiento es experimentar el amor en uno mismo, en no buscarlo obsesivamente entregando a los demás lo que en realidad no poseemos, eso sólo es hipocresía, es tranquilizar una conciencia invadida por los prejuicios y los temores. Para aspirar a trascender en la vida, debemos comenzar por amarnos a nosotros mismos, a experimentar la vida en nosotros mismos, a sentirla en nosotros mismos, a encontrar esa sabiduría interna que habita en nuestro interior y que forma parte de la sabiduría universal, a restablecer el equilibrio y la paz interna, sólo a través de despojarnos de prejuicios y temores arraigados, a dejar de competir por el poder, cuando carecemos del poder de amarnos!

Si inicialmente nos damos la oportunidad de renacer, y renacer significa nacer de nuevo, de observar la vida como si fuese la primera vez, de sentir como si fuese la primera vez, de escuchar hasta el más ínfimo sonido como si fuese la primera vez, de amar como si fuese la primera vez, de conocer como si fuese la primera vez, simplemente vivir el momento presente como si fuese la primera vez, de disfrutarnos tanto en la soledad como en la convivencia, buscar el aislamiento no del interior, sino el aislarnos de todo tipo de influencias destructivas y nocivas, que nos desarrollen un sentimiento de inferioridad y que provoca que estemos a la defensiva y seamos prejuiciosos en la convivencia diaria, mantener en constante movimiento nuestras capacidades tanto mentales como afectivas, para redescubrir en nuestro interior esa sabiduría innata que esta en contacto muy íntimo con la sabiduría universal, y así como es el orden en el universo, también desarrollar el orden en nuestro universo interior, para así poder armonizarnos con nuestro entorno y experimentar la armonía espiritual, y en el constante cambio y evolución del universo, analizarnos cada día para así lograr un verdadero cambio en nuestra individualidad y una evolución más allá de la percepción ordinaria; de esta forma hallaremos el real sentido del significado de la sabiduría, que es el experimentar y vivir tan plenamente como nos lo permitamos, para así permitirnos amar en la libertad de expresarnos y actuar conforme nuestra ética; la vida en esencia es vivencia en movimiento constante, es plenitud y evolución interna, es experimentar en carne propia más no en ajena, es permitirnos entregar este sentimiento de libertad y fuerza interior a los demás sin exigirles o condicionar algo a cambio, ya que la real enseñanza es entregar nuestro renovado conocimiento sin egoísmos ni vanidades, ahí nace la trascendencia, no física sino en el pensamiento y sentimiento de las personas que nos rodean, es compartir el saber propio para hacerlo perdurable en una cadena interminable de seres anhelantes del equilibrio interior.

El saber es como un río que fluye, porque en su fluir se renueva y purifica, mientras que si se detiene, se estanca y contamina.

La sabiduría no se expresa en palabras, se expresa en acciones porque el ser humano debe ser como un río que fluye porque es movimiento constante para renovarse día a día y purificar su esencia, experimentando su libertad sin estancarse ni contaminarse.